sábado, 10 de diciembre de 2016

Pensando en lo común...

Acabas de presentar unas conversaciones en torno a lo común. ¿Es la defensa de lo común un nuevo programa político de algo previamente existente, o tiene una base filosófica independiente? ¿Es una desconocida raíz común, una huida hacia delante o un nuevo estilo arquitectónico?
Yo creo que la defensa de los comunes se planteó desde un lugar interesante como es la crítica, por una parte, de las derivas más autoritarias y burocratizadas de lo público-estatal y, por otra parte, de los procesos recientes de privatización. Desde el campo de los comunes se entendió bien que se había producido un proceso de convergencia entre lo público-estatal y las dinámicas mercantilizadoras, especialmente en España, donde las grandes empresas siempre han parasitado el sector público.
El problema, para mí, es que alguno de los teóricos de los comunes han concedido demasiado al neoliberalismo, que les ha colado de rondón la idea de que todo lo público o estatal es sospechoso de burocratismo, autoritarismo, falta de transparencia y complicidad con la mercantilización. Por eso han tratado de buscar alternativas en modelos de cooperación propios de sociedades tradicionales. Creo que se equivocan. En primer lugar, el romanticismo arcaizante es absurdo. Los comunes tradicionales están llenos de sexismo, autoritarismo, xenofobia y toda clase de adherencias reaccionarias. En segundo lugar, es un error pensar que todas las instituciones públicas están condenadas a esa degeneración y corrupción típica de la era del neoliberalismo. 
También hay instituciones públicas cooperativas y abiertas. Creo que es más sensato pensar que hay un continuo entre lo público y lo común. Lo público es una de las formas (no la única) en la que nuestras sociedades de masas, diversas y complejas, han pensado lo común. Evidentemente lo común también tiene su espacio en las redes de reciprocidad, cooperativas, etc., pero estas deben ser pensadas en una continuidad con lo público. Del mismo modo que tenemos que pensar lo común para que no sea clasista, para que sea universalista, abierto y no reaccionario, debemos pensar lo público para que sea abierto, democrático y no autoritario.

CÉSAR RENDUELES: www.juegodemanosmag.com

1 comentario:

Isabel dijo...


Lo que yo conozco en torno a lo común está en este enlace:
http://17festival.zemos98.org/Commons

Pero este festival, que duró varios años, ya no se celebra por falta de fondos. Además de cargarse muchas de las artes con el iva, todo lo que era innovación también desapareció. No obstante los creadores no pierden la esperanza supongo o eso quiero creer.