Partimos siempre de algún punto, de algún espacio, desde el que nos lanzamos a vivir. Se trata de un acto iniciático más o menos consciente, un ejercicio de voluntad, de decisión, de reafirmación de las ganas de reemprender la vida...
Enemigo de la guerra y su reverso, la medalla no propuse otra batalla que librar al corazón de ponerse cuerpo a tierra bajo el paso de una historia que iba a alzar hasta la gloria el poder de la razón y ahora que ya no hay trincheras el combate es la escalera y el que trepe a lo mas alto pondrá a salvo su cabeza Aunque se hunda en el asfalto la belleza...
Míralos, como reptiles, al acecho de la presa, negociando en cada mesa maquillajes de ocasión; siguen todos los raíles que conduzcan a la cumbre, locos por que nos deslumbre su parásita ambición. Antes iban de profetas y ahora el éxito es su meta; mercaderes, traficantes, mas que nausea dan tristeza, no rozaron ni un instante la belleza...
Y me hablaron de futuros fraternales, solidarios, donde todo lo falsario acabaría en el pilón. Y ahora que se cae el muro ya no somos tan iguales, tanto vendes, tanto vales, ¡viva la revolución! Reivindico el espejismo de intentar ser uno mismo, ese viaje hacia la nada que consiste en la certeza de encontrar en tu mirada la belleza…
2 comentarios:
Eso es lo que intento, por recomendación de Barnsley y Mandelbrot.
La belleza no es más que la repetición de puntos dispuestos ordenadamente bajo la creación de la naturaleza. Mirar y ver.
un abrazo.
Enemigo de la guerra
y su reverso, la medalla
no propuse otra batalla
que librar al corazón
de ponerse cuerpo a tierra
bajo el paso de una historia
que iba a alzar hasta la gloria
el poder de la razón
y ahora que ya no hay trincheras
el combate es la escalera
y el que trepe a lo mas alto
pondrá a salvo su cabeza
Aunque se hunda en el asfalto
la belleza...
Míralos, como reptiles,
al acecho de la presa,
negociando en cada mesa
maquillajes de ocasión;
siguen todos los raíles
que conduzcan a la cumbre,
locos por que nos deslumbre
su parásita ambición.
Antes iban de profetas
y ahora el éxito es su meta;
mercaderes, traficantes,
mas que nausea dan tristeza,
no rozaron ni un instante
la belleza...
Y me hablaron de futuros
fraternales, solidarios,
donde todo lo falsario
acabaría en el pilón.
Y ahora que se cae el muro
ya no somos tan iguales,
tanto vendes, tanto vales,
¡viva la revolución!
Reivindico el espejismo
de intentar ser uno mismo,
ese viaje hacia la nada
que consiste en la certeza
de encontrar en tu mirada
la belleza…
AUTE AL PODER!!! :-)))
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