La significación del segundo plano sólo se comprende realmente en toda su extensión si consideramos que todas las imágenes de Irving Penn --ya sean retratos, series sobre los pequeños oficios y los artesanos de Inglaterra y francia, o fotografías de la gente de Marruecos, Benin o Nueva Guinea-- tienen el mismo fondo. En realidad, ese fondo es el escenario en el que Penn hace evolucionar a sus modelos. ya se trate de moda o retratos, el artista extrae la persona de su propio contexto social, con el fin de aislarla y llamar así más intensamente la atención sobre lo que ella es realmente.
El empleo de ese fondo, que permanece invariable, produce en realidad dos efectos: por una parte valoriza al individuo, extrayéndolo del anonimato; pero a la otra, sirve para realzar la vestimenta. Cada prenda de vestir, a partir del momento en que está presente sobre su escenario particular, se convierte para Penn en un objeto de moda. Esa idea se justifica desde el punto de vista de la historia de la civilización, aunque durante los siglos pasados el estilo de la vestimenta no cambiaba tan rápidamente como lo hace en nuestros días.
Para Penn, como para otros grandes fotógrafos de nuestro tiempo, los propios intereses fotográficos y la fotografía de encargo acaban siendo la misma cosa. Son expresión de una visión del mundo, de un especial interés por el medio fotográfico, que ofrece la posibilidad de aproximarse de una forma muy particular a sus semejantes y al medio circundante, para interpretarlos finalmente de una manera inconfundible.
Más información:
No hay comentarios:
Publicar un comentario