Pensarte, repensarte, reinventarte
en tus letras, sonidos, tus espejos
en negro sobre blanco, folios viejos
forzando en tu figura al desnudarte
en máscaras de voz que miran lejos
te llevan por tus pasos sin pisarte,
representan tu tez de amor al arte
en teatros de la vida más complejos
porque en el escenario has decidido
tomar la iniciativa a rienda suelta
sin trampa ni cartón que han escondido
tu gesto, tu palabra tan esbelta
en vuelo a tu través, que ya han salido
y en absoluto van a estar de vuelta.
en tus letras, sonidos, tus espejos
en negro sobre blanco, folios viejos
forzando en tu figura al desnudarte
en máscaras de voz que miran lejos
te llevan por tus pasos sin pisarte,
representan tu tez de amor al arte
en teatros de la vida más complejos
porque en el escenario has decidido
tomar la iniciativa a rienda suelta
sin trampa ni cartón que han escondido
tu gesto, tu palabra tan esbelta
en vuelo a tu través, que ya han salido
y en absoluto van a estar de vuelta.
Voy a cruzar el charco en un soneto
dedicado al blog Saltar del tren
7 comentarios:
Admiro tu capacidad para rimar un soneto, para ceñirte a su métrica. Muy bello.
enric, es personal y universal, es hermoso, y me ha llevado de tu mano a conocer otras importantes palabras y sentimientos.
Gracias y besos.
así es esta mujer, la que de mi lado del charco salta del tren...
qué buen soneto!
besos*
Ayer pude asistir a una conferencia sobre la figura de Rosalia de Castro, ya pensaba como mujer y no como animal reproductor. Un prodigio de mujer.
Aqués que tén fama de honrados na vila,
Roubáronme tanta brancura que eu tiña;
Botáronme estrume nas galas dun día,
A roupa decote puñéronma en tiras.
Nin pedra deixaron, en donde eu vivira;
Sin lar, sin abrigo, morei nas curtiñas;
Ó raso cas lebres dormín nas campías;
Meus fillos..., ¡meus anxos!..., que tanto eu quería,
¡Morreron, morreron, ca fame que tiñan!
Quedei deshonrada, mucháronme a vida,
Fixéronme un leito de toxos e silvas;
I en tanto, os raposos de sangre maldita
Tranquilos nun leito de rosas dormían.
-Salvademe ¡ou, xueces!, berrei..., ¡tolería!
De min se mofaron, vendeume a xusticia.
- Bon Dios, axudaime, berrei, berrei inda...
Tan alto que estaba, bon Dios non me oíra.
Estonces cal loba doente ou ferida,
Dun salto con rabia pillei a fouciña,
Rondei paseniño...¡Ne-as herbas sentía!
I a lúa escondiase, y a fera dormía
Cos seus compañeiros en cama mullida.
Mireinos con calma, i as mans estendidas,
Dun golpe, ¡dun soio!, deixeinos sin vida.
I ó lado, contenta, senteime das vítimas,
Tranquila, esperando pola alba do día.
I estonces... ¡estonces!, cumpreuse a xustiza:
Eu, neles; i as leises, na man que os ferira.
boa noite.
Una música en lenguas puedo oír
en vuestros comentarios trashumantes
por prados y portales anhelantes
del placer del lenguaje y del decir
sin demoras de tiempo ahora y antes
nos hemos puesto todos a escribir
y a ecribirnos palabras del sentir
y a expresar sentimientos acuciantes
que no quieren quedarse ya callados,
que quieren pronunciarse a voz en grito,
que saben que no son inmaculados,
que pasan por los campos del proscrito
porque cruzan caminos encerrados
en ámbitos del mundo más maldito.
Un beso y un abrazo en las palabras
Un bico e un abrazo nas palabras
Un petó i una abraçada a les paraules
Musu batean eta besarkada batean hitzetan
Pues ayer debí borrar mi comentario...
Era un poco largo.
Me gustaba la foto y el poema iba creciendo con ella
Besos
Hola Enric, ya te envié un mail personal pero no quiero dejar de hacer público mi agradecimiento y emoción por tus hermosos y sensibles versos.
Un abrazo más que agradecido!
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