lunes, 23 de febrero de 2015

Espejos de sirena...

Foto: Àngel S. Martínez



XXIV
  
Sintiéndose en su voz el pescador
inmerso en la voz de la sirena,
la voz de la sirena que se aleja…

Y en su mano el cristal el pescador,
sus manos, sus oídos y sus ojos
traspuestos tras la voz de la sirena…


Y en su cuerpo fundido en esa voz
que ocupa cada fibra de su cuerpo,
su  reflejo en las líneas del espejo:

Y en sus ojos, sus ojos ya cerrados,
sus oídos, oídos que se inundan,
y en sus manos, sus manos bien cerradas
(y en su mano un cristal el pescador),
y en sus manos, las líneas de sus manos,
su reflejo en las líneas del espejo,
las líneas del espejo que se alejan…


Y en su mano el cristal el pescador
y una clave cifrada en un espejo
y un espejo que forma y que deforma
su imagen, esa imagen que se aleja
viajando tras la voz de la sirena
consciente de ese sueño de sirena
de voz de la sirena de la sal…


Sin ojos y sin manos, sin oídos,
sin cuerpo que no sea de la sal,
sin cuerpo que no sea de sirena,
sin vida que no sea de su vida
sin vida de sirena sobre el agua
sin vida sin la estatua de la sal
sin vida sin la voz de la sirena…


Latiéndole la sangre en los latidos
de labios, comisuras de los labios,
de lengua, de papilas de la lengua,
de boca, de paredes de la boca,
de laringe, de cuerdas de laringe
vibrando en los repliegues inferiores
que suenan en los tonos del sonido,
que interrumpen el aire en su salida,
que combinan vibrando interrumpiendo
sonidos con sentidos con un canto,
un canto de sirena de la sal:

lisi nol, nul nul se,
liri son, nul nul se,
lili sol, nul nul se,
lisi nol,
liri son,
lili sol,
si nul mar…


Y un sueño en ese espejo el pescador…

No hay comentarios: