domingo, 3 de octubre de 2010

Mujer Eco doblándose en los labios

Detalle de "Eco y Narciso", de John W. Waterhouse




"Tremedal que xera esta doenza..."*
terreno pantanoso y enturbiado,
césped en superficie aparentado,
tremendal que genera esta dolencia...

Si en profunda esperanza despeñado
mi abismo aspira a un cielo sin conciencia
que me suba en sus alas de demencia
este azar hasta un punto más alzado

donde el techo retiemble en levedad
de andar sobre tu piel, sobre tu peso
que atenta contra ley de gravedad

transcrita en las palabras de un beso
en ecos de estos labios sin edad
mezclados con las llamas de embeleso...


*El primer verso es del poeta Xoán Abeleira
Esta entrada le va dedicada, y también para Inés, que me lo ha dado a conocer.

6 comentarios:

ines dijo...

El contestaría...

Os máis afortunados, coma min,
Confórtanse, se cadra, por un intre,
Coa fresca, polícroma quietude
Que respiran á altura dun parque,
Pouco antes de volvérense esluír
Na opaca resaca das calellas.

Mais eu agradezocho cun bico

Merche González dijo...

... embeleso, embeleso, embeleso...

Besos mudos

silvia zappia dijo...

ecos de besos, besos,besos...


besos*

Enric Batiste dijo...

Habrá que comenzar a escribir
un libro de los besos en los labios...

marce dijo...

Saludos enric; magnífica construcción poética, casi si gravedad.
Es tal la cantidad de fotos e imagenes y el bombardeo de lo que ocurre cada año, que cae en saco roto hasta los elementos que componen la imagen del incendio. Ocurren como si tal cosa y se contempla con la aprobación de la indecencia que va haciendo mella en nosotros. No hay valor a colgar la imagen en el departamento de obras de cada ayuntamiento de este católico-apostólico-mundo del cazo, bajo cuerda.

bon dia

Enric Batiste dijo...

bos días, Marce
Suerte que en Finisterre moráis quienes
sabéis ver y decir, decirnos más
de los que dicen que es solo lo que es...

Abrazo bienvenido en la ventana